Zaragoza, previsión de toda la semana en las afueras, en el reciento de la
expo, sin un duro y solo en posesión de tarjeta.
Pues bien, aprovechando que tenía que ir a la estación de tren, que estaba
próxima a la expo, busqué y encontré un cajero, con la suerte de ser de mi
banco y así poder sacar dinero sin comisión del puto cruel y vil mal, que te
sajan en algunos cajeros.
Pues bien, conteniendo la alegría por ahorrarme la susodicha comisión,
empecé a operar en el cajero y ocurrió, si, ocurrió eso que nunca había pasado, el cajero saco su gran pene y me
lo restregó por la cara, se quedo con mi tarjeta de débito.
Después de llamar varias veces al servicio técnico, tuve la gran suerte ya
que me atendió el tío el cuál demostró los primos que eran sus padres y en 30
minutos no me soluciono nada, con lo que tuve que llamar a la oficina de la
sucursal de Albacete para intentar conseguir solución.
La solución que me dieron es que tenía que ir a un cajero de Zaragoza antes
de las 00:00 de esa misma noche con un código especial poder hacer una
operación poco habitual para sacar dinero.
Estando en una ciudad bastante grande como Zaragoza, que no tengo ni idea de
nada, donde solo hay cajeros en el centro de la ciudad y poniendo que iba a
estar todos los días en el recinto de la expo, que está muy a tomar por el culo
del centro...iba a ser una tarea más que complicada que conllevaría multitud de
risas, ya que el dinero en estos tiempo sirve para poder comer y sobre todo,
poder viajar ya que ni tenía billete ni clifford.
Después de buscarme la vida, a última hora de la tarde y de corre prisas me
pudieron bajar al centro para buscar un cajero que esa fue otra historia y que
me dejará sacar dinero con el código mágico que solo podía usar una vez y antes
de las 00:00, a lo cenicienta.
Yo, que suelo vivir al límite, que me tomo todo muy tranquilo, he de
confesar que por un momento me preocupe por no poder asistir el lunes a clase,
pero sinceramente, vas a tener que hacerlo mucho mejor si quieres joderme señor
Jesucristo.