Si amigos, ha vuelto a pasar, tengo una facilidad innata
para que ocurran cosas cuando voy solo.
Gracias a mi amiga Sofía ( :**), ya tengo bici en León y
puedo ir a hacer ruticas de esas mágicas cuando el tiempo me lo permita, que va
a ser bastante poco dentro de lo que me gustaría, pero en poco ya hemos puesto
en marcha la maquinaría y ya he salido dos veces de ruta, una con la mejor guía
de rutas de bicicletas por León, Alba ( :** ) que tiene claro en todo momento
por donde ir, que es por donde más cuestas existan, y otra, hoy mismo yo solo a
la aventura, como en los viejos tiempos ¡!
Después de improvisar al máximo, creerme perdido 7 u 8
veces, he encontrado un carril bici cojonudo, lleno de cosas verdes, ríos,
montañas, viejos descamisaos, y bichos, muchos muchos bichos y animalejos
salvajes potencialmente peligrosos.
Y digamos que hoy he sufrido un "Déjà vu", me he vuelto a
jugar la vida contra una serpiente, la cual me cortaba el camino y no me dejaba
pasar, como la anterior vez, pero en está ocasión todo ha sido más rápido y
rodado, nunca mejor dicho. Para los de la logse, “deja vi”, esa sensación que
te suena familiar, como si la hubieras vivido ya.
Para refrescaros la memoria, está es la primera historia con
las serpientes http://historiasgraciasquequizasundaoscuente.blogspot.com.es/2011/06/la-serpiente-vs-arroz-con-garbanzos.html
, verídica punto por punto y que se, que algún día volveremos a encontrarnos.
Al final todo se dio más o menos normal y volví a casa sano
y salvo, aunque no podemos decir lo mismo de la serpiente, casi tan grande como
una cobra pitón de todos los santos.